la luna se ha asilvestrado por completo,
poniendo el grito en el cielo hace un gesto,
un gesto de carne y hueso, que pone el bello de punta
aunque tengas los pies de barro
y el corazón en el desierto,
pues mas vale pájaro en mano,
al sueño enredado entre anzuelos
de venenos y veranos deseados.
la luna desenfunda su alma depredadora
para buscar presas de su tamaño en noches,
en noches como esta,
y cuando nos tiene a su merced
saca sus colmillos de loba, clavándonos
su mirada de animal caliente, que no deja no
títere con cabeza bailando entre las piernas.jose manuel Carmona rosales
lunes, 1 de junio de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario